Salvación certificada para el filial (1-1)

Lo metió Elena, pero fue el gol de todos y todas. Hubo que sufrir de una manera casi sobrenatural, pero el guion fue de película con final feliz. El filial del Zaragoza CFF certificó su permanencia en la Primera Nacional en esta segunda etapa, tercera categoría del fútbol femenino español, después de empatar en el tiempo de descuento ante el Vic con un gol de vaselina de la capitana, un tanto que vale oro, un golazo de fe de un equipo muy joven y que ha conseguido sobreponerse a todo en su primera campaña en categoría nacional.

Ahora bien, aunque al final todo fue alegría, abrazos y hasta alguna lágrima de felicidad, el partido fue durísimo, sobre todo en lo anímico. Después del pinchazo del Igualada ante el Son Sardina, las chicas de José Manuel Perna sabían que con un empate les bastaba para no jugárselo en la última jornada, pero ir por debajo en el marcador desde el inicio de la segunda mitad fue una losa que no se pudieron quitar hasta el descuento. A la épica, que sabe hasta mejor.

Susana fue la protagonista de la primera ocasión del partido con un disparo de zurda que se le fue demasiado cruzado y poco después, el Vic contestó con una acción similar. Tras el primer cuarto de hora de tanteo, el Vic comenzó a generar peligro con combinaciones mientras el filial trataba de buscar más el juego directo. Antes del intermedio, la defensa salvó un mano a mano de Elena Valej y también una falta botada por Susana peligrosísima.

El paso por los vestuarios trajo malas noticas. La oportunidad de Elena Valej de zurda fue el preludio del gol del Vic, que llegó después de un tiro lejano después de un despeje de Elena Casao saliendo fuera del área. Tocaba remar, luchar con todo para igualar e ir con el corazón cuando las piernas empezaban a fallar. Costó llegar a través del juego, aunque tuvieron algunos disparos Sara Balma, Andrea Marcano y Cristina.

Así hasta que en el descuento llegó el gol que certificaba la permanencia, el tanto de un equipo que no ha parado de crecer y creer. Elena Valej corrió a un balón largo a la espalda, sorteó la salida de la portera con una vaselina y, con cierto suspense por el bote, acabó empatando el duelo ante la locura de todo el Zaragoza CFF. El filial continuará un año más en Primera Nacional con todo merecimiento.